Casas rurales en Navarra
RED DE HUERTOS ECOLÓGICOS
DE LA VALDORBA
CUIDADO DE ÁRBOLES FRUTALES
El cuidado de los frutales se empieza a comienzos de noviembre, abonando la tierra con estiércol o compost.
Cuando haya terminado la caída de la hoja, trabajamos la tierra (en días de Fruto según el calendario lunar) al mismo tiempo que pulverizamos la base alrededor de cada árbol con el preparado, y embadurnamos el tronco y las ramas con la pasta.
Cuando empiecen a aparecer las primeras yemas y tengamos una temperatura mínima de 10 grados, volvemos a pulverizar tronco y ramas con el preparado, al que podemos añadir agua de ortiga, hasta tres veces cada 15 días.
*Contenido del preparado:
-infusión de cola de caballo (hervir 50g. de cola de caballo por cada tres litros de agua durante una hora) La cola de caballo, por su alto contenido en silicio, influye en la armonía de la tierra y en la salud, fortaleza y resistencia de las plantas, especialmente frente a enfermedades criptogámicas (mohos, mildiu…)
-cenizas de madera o papel. Aportan potasio y muchos minerales en pequeña cantidad, que el árbol ha sustraído de lugares profundos durante su larga vida
-cal agrícola. Contiene carbonato de calcio, mucho magnesio y otros microelementos. También se puede utilizar cal apagada, de argamasa o hidráulica, piedra caliza, dolomita o cal viva en polvo
-4 ajos machacados. El ajo es antibiótico, antiséptico y antiacárido natural.
-una cucharada de azufre (cuidado, no pasarse) Tiene las mismas propiedades que los ajos, pero afecta a la tierra, y el ajo a las partes volátiles.
-2 o 3 cucharadas de sulfato de cobre. Limpia la roña, el hollín y los parásitos que entran en troncos y ramas.
-Un cristal de amatista que favorece la transmutación de los elementos que hemos puesto en el preparado, y elimina las energías negativas.
*Pulverización del preparado:
Unos quince días después de hacer el preparado, lo colamos y lo mezclamos en agua en proporción de uno a diez (un litro de preparado por diez de agua) Es muy importante dinamizar la mezcla, al menos durante 20 minutos. El objeto de esta operación es transmitir al agua las características del preparado. El removido incesante produce una fricción entre el preparado y el agua, confiriendo a esta última las propiedades del primero. El removido ha de originar un embudo en el agua y de dos a cuatro veces por minuto se invierte el sentido del movimiento, formando un nuevo embudo.
El mejor momento para pulverizarlo en la tierra es por la tarde, hacia la puesta del sol, cuando cae el rocío y la tierra presenta mayor absorción Es más efectivo sobre tierra húmeda.
Cuando vayamos a rociarlo en primavera sobre las ramas y las hojas, es mejor hacerlo por la mañana, preferiblemente en un día seco y soleado, o por lo menos sin lluvia.
El efecto no mejora a más concentración o con cantidades mayores, sino sólo por repetición de los rociados.
*Elaboración de la pasta para el tronco: metemos en una cuba de madera 1/4 de boñigas de vaca, 1/4 de arcilla, ¼ de cal y 1/4 de agua dinamizada con el mismo preparado. Se remueve todo con una pala durante una hora, es decir se dinamiza. Se deja la masa en un lugar fresco y oscuro y puede utilizarse durante semanas.
Una vez que hemos pulverizado el preparado en ramas y hojas, podemos seguir con los tratamientos recomendados por María Thun:
“En días de Flor, se puede hacer una vez una pulverización con infusión de Diente de León y una vez con infusión de Manzanilla.
En un día de Fruto, puede rociarse infusión de Milenrama, independientemente del preparado de sílice.
Las infusiones y el sílice, siempre han de pulverizarse sobre las hojas, preferiblemente por la mañana y en los días de Fruto de los meses de junio y julio.
Si es necesaria una poda de verano, escogeremos un día de Flor o de Fruto del periodo de plantación o de Luna descendente, en el mes de junio, en parcelas tardías en julio e incluso agosto. En el caso de los nogales la única poda que se le dará será durante el mes de agosto, ya que en invierno es muy perjudicial.
Para la cosecha de fruta para almacenar, aconsejamos los días de Flor o Fruto, con la Luna ascendente, es decir: no durante el tiempo de plantación.
Después de la cosecha, pero antes de la caída de la hoja se aplica una pulverización de sílice en un día de fruto por la tarde, después de las 15h. Esta pulverización hace madurar el tronco, es preventivo contra una posible plaga de hongos y favorece la formación de las yemas de flor del siguiente año.”
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