Detrás de Agroturismo Mari Cruz estamos dos “incoscientes” neo rurales, que han montado una familia y un proyecto buscando su sueño. Alicia y Luismi. Luismi y Alicia, que hacemos un buen tándem. A veces uno pedalea muy fuerte y el otro se deja llevar, pero a veces cambian las cosas y es el otro el que intenta tirar del uno, que se ha quedado sin fuerzas. Y cuando los dos pedaleamos al mismo tiempo, pues es una pasada cómo sentimos que avanzamos juntos…
Y luego están, regalándonos besos y bailes, Ada y Noé, que han nacido y crecido en medio de todo este sueño, y que comparten, aprenden y juegan, rodeados de niños que vienen y van y de árboles que les ceden sus ramas para columpiarse.
Y están nuestras mascotas, que forman parte de nuestra familia, y también del proyecto: Pirata y Sansón que ya nos abandonaron y el grandullón de Ki, recién llegado como quien dice, que se deja mimar por niños y mayores.
Y a lo largo de los años nos han ayudado en todo este jaleo muchas personas, muchos amigos, las familias de ambos, y un buen puñado de vecinos. Y con todos, hemos conseguido sacar adelante esta locura, y poder seguir viviendo aquí.
Este año cumplimos 16 años y por nuestra casa han pasado miles de personas. Parejas, familias, personas solas, moteros, ciclistas, montañeros, caseros, cocinitas, juguetones, magos, músicos, deportistas, corricolaris, peones de obra, huerteros, fontaneros, informáticos, ilustradores, escritores…hemos tenido de todo!!! Algunas ya son amigos, otros han dejado poca huella, otros vuelven a los años (qué ilusión!!!!) porque se quedaron “prendados”, y otros son auténticos patrocinadores de nuestra casa (jejeje). Con algunos hemos compartido muchos momentos y “charlas para cambiar el mundo”, con otros hemos aprendido de la huerta, de los animales, de su manera de hacer el pan, de infusiones y licores, de cómo hacer el aceite de hipérico…y de cocina, umm las paellas y arroces valencianos!! Y también hemos observado y aprendido de formas de ser, de pensar y de hacer diferentes…tenemos mucha suerte en poder tener tanta variedad de gentes, de niños, de familias….así vamos creciendo, porque aprendemos y compartimos un montón.
Además nuestras instalaciones en estos años también han ido creciendo: De la casa de 3 habitaciones con la que empezamos, hemos pasado a tener también dos apartamentos familiares, una cocina-comedor común con un árbol de juegos, una biblioteca y una cabaña en un árbol!!
Nuestros animales ya cuentan con sus casas y tenemos una borda donde están las burras y las ovejas. Las huertas ya tienen su cercado a prueba de cualquier intruso.
El entorno también ha cambiado: tenemos más árboles frutales, un lavadero restaurado, un arenero para los peques, una zona de juegos en el roble…
Aquí seguimos, intentado poder vivir y trabajar en este bello rincón del pirineo, recibiendo y compartiendo con otras personas la ilusión por la vida sana, por la educación y la naturaleza.
