Casas rurales en Navarra
Ayer precisamente hablamos con un amigo que está muy dispuesto a ayudarnos y enseñarnos a cuidar abejas.Como somos un oco ositos en casa, comemos mogollón de miel y es un tema que nos parece apasionante, por las costumbres y relación que se tenía de siempre con estos animales.
Os copiamos parte del interesante artículo que publican en ladyverd sobre este tema. En su web encontraréis más información.
En su página web, La Reina del Sol ofrece consejos sobre diez cosas que puedes hacer para ayudar a las abejas:
1) Planta flores en tu jardín
Las abejas están perdiendo sus hábitats en el mundo entero debido a las prácticas de agricultura basadas en el monocultivo, a los jardines de césped impecable sin flores en las afueras y a la destrucción del paisaje natural. Simplemente con plantar flores en tu jardín, patio o en una maceta ayudarás a que las abejas tengan alimento. Evita el tratamiento químico de las flores, ya que los químicos se filtran en el polen y afectan de forma muy negativa a las abejas. Planta muchas flores del mismo tipo juntas (a las abejas les encanta el volumen). Algunas de las plantas que más les gustan:
Primavera: lilas, penstemon, lavanda, verbena y wisteria.
Verano: menta, cosmos, calabacines, tomates, calabazas, girasoles, orégano, romero, amapolas y pasifloras.
Otoño: fucsia, menta, salvia y verbena, entre otras.
2) Las malas hierbas pueden ser buenas
Al contrario de la creencia general, un césped lleno de trébol y dientes de león es un puerto para las abejas y demás polinizadores. Deja crecer tu césped un poco. Las flores silvestres, que se pueden clasificar como malas hierbas, son una de las fuentes de alimentos más importantes para las abejas nativas. Si realmente quieres librarte de algunas hierbas, deja que florezcan primero y después arráncalas o córtalas antes de que echen semillas.
3) No utilices químicos ni pesticidas para el jardín.
Los productos químicos hacen que tu jardín esté impecable, pero están provocando precisamente lo contrario que la vida en la biosfera y pueden dañar al sistema de abejas. Estos tratamientos son especialmente dañinos si se aplican mientras las plantas están floreciendo, porque llegarán al polen y al néctar y la abeja los llevará a la colmena, introduciéndose en la miel, que acabará en nuestra cadena alimentaria. Los pesticidas, en especial las variedades neonicotinoides, son unos de los mayores responsables del CCD.
4) Compra miel natural local
La miel que compras es un mensaje directo a los apicultores sobre cómo deberían mantener a sus abejas. Por este motivo y por tu propia salud, intenta comprar miel natural local que provenga de colmenas no tratadas con pesticidas. Algunas veces puede ser difícil localizar un tipo de miel que sea verdaderamente natural, verdaderamente local y verdaderamente no tratada con pesticidas. La solución más sencilla suele ser acudir al mercado de venta directa y conocer al apicultor, plantearle las preguntas adecuadas y averiguar cómo mantiene a sus abejas. Si son apicultores respetuosos que las mantienen de forma natural y sostenible, ¡haz un nuevo amigo y apóyale!
5) Las abejas necesitan agua. Coloca un pequeño cuenco con agua fresca en el exterior.
Si has plantado flores y empiezan a venir las abejas, coloca un platito con agua y piedras para que puedan apoyarse en ellas y no se ahoguen. ¡Verás cómo te lo agradecen!
6) Compra productos ecológicos de un agricultor local.
Muchas veces, obtener un certificado ecológico puede ser todo un reto tanto económico como moral para los agricultores. Muchos agricultores locales no cuentan con la certificación y, sin embargo, sus productos son tan buenos como los certificados, y además son locales. Esto colaborará con la economía local y ayudará a mantener un espacio libre de pesticidas (los cultivos de esos otros agricultores), donde las abejas podrán vagar sin el peligro de los químicos.
7) Aprende a ser apicultor mediante prácticas sostenibles. Busca una asociación local de apicultores que ofrezca clases y únete a ellos.
8) Comprende que las abejas no van a picarte.
Las abejas son vegetarianas. Buscan el polen y el néctar incluso a largas distancias de su colmena y vuelven con este alimento para ellas y el resto de los habitantes de su colonia. Al contrario de lo que creemos, las abejas no nos picarán si tenemos en cuenta unas pocas medidas de precaución:
I- Quédate quieto y tranquilo si hay una abeja a tu alrededor o se posa en ti. A las abejas les gusta posarse en la gente y olerla, y las feromonas del miedo pueden ser una provocación para ellas.
II- No te sitúes delante de una colmena o en el camino a una concentración de flores. Las abejas están siempre muy atareadas y, si no te interpones en su camino, ellas no lo harán en el tuyo.
III- Aprende a diferenciar entre abejas y avispas. Al contrario que las abejas, las avispas no mueren cuando pican a una persona. Las avispas son carnívoras y les atraen los sándwiches, las barbacoas y las bebidas azucaradas. Las abejas, sin embargo, son vegetarianas.
9) Comparte estos consejos con otra gente de tu comunidad, en reuniones, conferencias, escuelas y universidades, incluso a través de emails y en foros online.
10) Dile lo que piensas a los gobernantes
Más información en la web , la reina del sol