Casas rurales en Navarra. En Villanueva de Arce
Muchas veces, nos volvemos locos para hacer excursiones chulísimas con los txikis y nos vamos al quinto pino (igual que las vacaciones), y sin embargo, teniendo un entorno como tenemos, no hace falta nada para disfrutar con los peques, simplemente descubrir e investigar y jugar.
No hay comida más suculenta que un bocadillo en el monte , ni baño más refrescante que en una poza , ni lugar más mágico y misterioso que un bosque de hayas y robles.Es una suerte con este calor poder pasear fresquito.
Ahora, después de andar mucho rato en «silencio» ( si, si, Noé estuvo calladito como un campeón), no conseguimos ver un ciervo.
Ayer hicimos una buena caminata, y subimos mucho desnivel, y aunque no se oyen porque las fotos no tienen sonido, hubo abundantes quejas por parte de los más txikis ( puede parecer todo muy idílico y luego nos contáis que vuestros hijos no suben así, los nuestros tampoco, eh?).
Es una pasada la de multitud de atractivos que nos cede el bosque.Estamos en temporada de fresas silvestres y de arandanos ( riquísimos), hay un golpe de hongos, insectos curiosos, ranas camufladas, árboles mágicos, pájaros increíbles, carboneras, regatas fresquitas, lugares fantásticos.
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| momentos de tensión, paso peligroso |
Cuando te internas en el hayedo sin rumbo, siempre encuentras un árbol, o una piedra , o una regata o un lugar fantástico y nuevo. Es una suerte poder vivir aquí.
Prometemos recomendarlo más a los clientes de nuestras casas rurales.
